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El libro es el resultado de la tesis doctoral del Padre Rector, Fray Enrique Arenas Molina, y según las palabras del Director de Investigaciones de la Uniagustiniana, Mauricio Rincón, “hacer un libro de una tesis doctoral implica un cambio, pues de ser consumidores de conocimiento, pasamos a ser productores de conocimiento, es un camino muy largo en un proceso de formación. Este libro reúne 175 páginas que demuestran la capacidad de un doctor de generar conocimiento en temas pertinentes para una disciplina, y esto es el trabajo de toda una vida, y lo que a un investigador lo hace reconocido en distintos ámbitos. La academia genera redes de conocimiento, se transforma, nos permite como Institución e Investigadores un crecimiento constante; “Jesucristo nos llama. La resurrección como acto de fe”, es el resumen de muchas noches de trabajo, lectura y sistematización de la información, y se ve reflejado en un producto de investigación; para la Uniagustiniana es un orgullo presentar el libro del Padre Enrique Arenas”, concluye.

"Jesucristo nos llama. La resurrección como acto de fe"

El Padre Enrique Arenas Molina, religioso agustino recoleto, oriundo de Urrao - Antioquia. Cursó los ciclos filosófico y teológico en el seminario Mayor San Agustín de Manizales y en el seminario Mayor Teologado de Suba en Bogotá. Su noviciado lo hizo en el Desierto de la Candelaria en Ráquira - Boyacá. Adelantó, en la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, la Licenciatura en Teología (1993), luego en la Universidad Católica de Manizales el diplomado en Ética – Bioética y la especialización en Educación (1996), y obtuvo el Magister en teología en la Universidad Pontificia Gregoriana, en Roma (1998). Magister en Filosofía y Docencia Universitaria en la Universidad de Caldas en Manizales (2009), Doctor en Teología de la Universidad Pontificia Bolivariana de Medellín (2014). Durante su ministerio pastoral se ha desempeñado en distintos e importantes cargos como rector, docente, orientador de encuentros pastorales con Cristo, promotor vocacional y coordinador de Pastoral.

"Jesucristo nos llama. La resurrección como acto de fe"

Respecto a su inspiración para escribir su tesis doctoral, la cual dio como resultado el libro “Jesucristo nos llama. La resurrección como acto de fe”, nos contó lo siguiente: “Cuando murió mi madre no le encontraba sentido a la vida, pedía ayuda al Santísimo para salir de esta tristeza. Para esa época ya estaba en el seminario, en donde comencé a manifestar un miedo de mi infancia, la claustrofobia, debido a esto, me enviaron donde el psicólogo, este dijo que yo estaba loco. A mi madre la veía hasta en las paredes y sentía miedo, en Bogotá me enviaron donde un psiquiatra. En esos momentos me dediqué al deporte y a leer, leía todas las obras agustinianas, y empecé a pensar en torno a la muerte, en el suplicio de Jesús, en que a Él también lo llamaron loco, entonces me fui a profesar, pero seguía con ese gran dolor. Un día sufrí un accidente, la persona con quien viajaba quedó parapléjica, y a mí me dijeron que durante tres días no me podía mover, y yo con el dolor y el sentimiento en mí, postrado en la cama, de repente, llegó un momento en el que me senté, el médico me reclamó con angustia, que no debía moverme, pero yo le dije al médico: yo no hice nada, a mí me sentaron, en ese instante vino a mi mente la imagen de Jesús resucitado, muy humano, quien no juzga, quien ama y es auténtico. Sentí a un Jesús cercano a nosotros, que nos llama, nos perdona, nos toca el corazón, lo vi y El me levantó, me dijo: levántese, predique y escriba, y este hecho es algo que analicé con la razón más que con la fe, fue real. Comienzo a partir de ese accidente y ese aprendizaje, a pensar en la resurrección, la comunidad me envió a Roma, y ahí en la Gregoriana conocí un reconocido experto en cristología y resurrección, él me dirigió la tesis”, manifiesta el Padre Rector.

En la tesis profundizó respecto a este tema, la Resurrección de Cristo, Dios se lo ha llevado y está con el Padre. Jesús se apareció ante María Magdalena, Pedro, y al discípulo amado, quienes vieron y creyeron, en esto consiste el argumento, y a partir de ese argumento viene la pregunta, “yo ya entendí Jesús no está aquí, pues ha resucitado y está con Dios, y San Pablo dice que Dios lo ha resucitado de entre los muertos y está con Él, entonces, catequéticamente digo: cómo lograr que la resurrección de Jesucristo sea el fundamento de la vida nueva que nos comunica el Espíritu Santo, y aquí entendí que Dios está con nosotros, y que Jesús es nuestro hermano y amigo, y el Padre es el que nos comunica esta gracia, Jesús fue exaltado. Y me acordé de las palabras que luego de la resurrección de Jesús, los ortodoxos cristianos repetían: Cristo resucitado”, afirma el Padre Rector.

Finalmente, el Padre nos invita a leer el libro, el cual se consigue en la tienda Uniagustiniana, y nos deja una última reflexión: “Cuando usted cierre los ojos y vea sus problemas, piense en Dios, pues en ese momento le llegará la calma, Él es el Dios de la calma, de la prudencia, de la alegría del corazón, sepulcro vacío, victoria sobre la muerte, las apariciones le dan el sentido al sepulcro vacío, es un signo esencial que nos presentan para que nuestra fe sea más cercana a Dios, Cristo ha resucitado. A mí me dijeron que no servía para la vida comunitaria, pero yo soy un buen religioso. A veces nosotros buscamos a Jesús en muchos sitios y no lo encontramos, pero lo tenemos en nuestro corazón, Jesús está vivo en nuestro corazón, y nosotros como cristianos debemos de predicar a ese Jesús resucitado que nos llama y nos sigue llamando”, concluye.